El pasado mes de marzo estuvo marcado por la señalada fecha del 8 de marzo, esta vez reforzada por los preocupantes acontecimientos previos en violencia de género en el contexto esteliano. Sin embargo, durante este periodo las mujeres campesinas de la zona también han realizado actividades de empoderamiento productivo e ideológico, y se han acompañado diversos procesos de desarrollo de las comunidades locales.La oleada de femicidios vivida durante febrero tuvo mucho impacto en la conmemoración y reivindicación del 8 de marzo por parte de la Fundación Entre Mujeres, tanto a nivel de planificación de actividades como en cuanto a su contenido. Por esa misma razón, este año la movilización se realizó en el municipio de Pueblo Nuevo, núcleo administrativo que abarca a varias de las comunidades con las que trabaja la FEM, una de las cuales se trata de la comunidad de Los Llanos, lugar donde el pasado febrero dos hombres perpetraron el femicidio de una niña de 12 años.
La propia madre de la niña encabezó la movilización que exigía el final de la violencia ejercida contra las mujeres campesinas, en la cual participaron trabajadoras de la FEM, de la Central de Cooperativas Las Diosas, y también hombres campesinos que realizan procesos de formación y reflexión para fomentar las relaciones equitativas y el fin de la violencia machista.
En cuanto a los proyectos que ya se están desarrollando en el seno de la organización de mujeres campesinas y con acompañamiento de Paz con Dignidad, ya se inició el contacto con la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua para la elaboración de los estudios de suelo y de bienes hídricos de las comunidades del municipio anteriormente mencionado, Pueblo Nuevo. Estos estudios servirán de base para la elaboración de una investigación completa sobre las amenazas, riesgos y las potencialidades de los suelos y el agua de las comunidades, para así poder implementar en un futuro las medidas y procedimientos más adecuadas para mejorar la resiliencia frente al cambio climático.
Relacionado con esto último, también se ha establecido también la construcción de una cisterna para el acopio y almacenamiento de agua, un bien cada vez más escaso y contaminado por las distintas iniciativas privadas y la degradación del medio ambiente. Habiendo seleccionado el lugar de construcción y una vez realizadas todas las gestiones administrativas correspondientes, en los próximos días se procederá a comenzar la construcción. Para ello, un grupo de 8 mujeres y hombres jóvenes fueron capacitados el año pasado en construcción de cisternas de una forma sostenible y económica, y serán esas mismas jóvenes las que coordinarán y llevarán el peso de la construcción, involucrando a su vez a la comunidad en su conjunto. Dos jóvenes de los 8 estuvieron recientemente en el municipio La Caridad de Honduras, acompañando la capacitación y construcción de una cisterna a través de las alianzas transfronterizas. De esta manera, el conocimiento en torno a las especificidades técnicas y a las implicaciones y consecuencias de la gestión del bien hídrico llega a cada vez más campesinas concienciadas con el respeto y cuido del medio ambiente, siempre desde una perspectiva de género que evite que las dinámicas patriarcales se extiendan también en estas actividades.
